LA PLANTA DE CANNABIS
La planta de cannabis se utilizó por miles de años en distintas culturas alrededor del mundo para distintos fines, entre ellos, la medicina. La planta posee distintos principios activos, denominados Cannabinoides. Estos Cannabinoides, en un número de más de 60, tienen distintas funciones, algunas descubiertas, y en su mayoría sin tener en claro aún cual es propósito. Estos Cannabinoides, por estar dentro de la planta se denominan Fitocannabinoides.
El cuerpo humano posee, en la superficie de muchos tipos de células de nuestro organismo, sitios específicos donde se acoplan estos principios activos de la planta, los fitocannabinoides. Los más comunes, y de cuales se tiene mayor información son el THC, el CBD, CBG, CBN y algunos más. Los receptores de estos cannabinoides son denominados CB1 y CB2, encontrándose distribuidos por todo el cuerpo.El cuerpo humano también produce moléculas similares a las de la planta de cannabis, llamados endocannabinoides (endo=adentro).
Los cannabinoides tienen muchas propiedades medicinales, y esto permite que algunas dolencias y patologías puedan ser tratadas con cannabis, tales como cáncer, epilepsia, glaucoma, esclerosis múltiple, fibromialgia, dolor crónico, etc.
DESCRIPCIÓN DE LA PLANTA
La cannabis es una planta anual, es decir, un vegetal que germina, crece, florece y muere en el curso de un año. Normalmente se germina la semilla en primavera y crece durante el verano. Termina de florecer en otoño produciendo flores.
Las plantas macho, generan sus flores, desde donde liberan el polen, para que las plantas hembra que han generado sus cálices puedan recibirlo, y así quedar fecundadas, produciendo las semillas. Estas semillas maduraran dentro de los cálices de la hembra, para luego caer al suelo y germinar en la primavera siguiente.
La cannabis también se puede reproducir asexualmente. Esto significa que de un solo ser vivo ya desarrollado, se desprende un trozo del cuerpo, los cuales son capaces de formar un individuo completo, genéticamente idéntico al primero sin la necesidad de dos progenitores y sin la intervención de gametos sexuales.Este proceso es utilizado para reproducir la misma planta que hemos visto crecer y desarrollarse con las características que queremos mantener.
Este proceso de reproducción se denomina esquejado, o clonado, es sencillo y nos asegura mantener la misma genética utilizada anteriormente. (Fig. 4).
Desde el punto de vista científico, todo el cannabis es Cannabis sativa. Existen diferentes variedades con distintos patrones de crecimiento, efectos y composición de cannabinoides. Las variedades originales con diferentes características fueron, a lo largo de la historia, utilizadas, combinadas y mejoradas para diferentes usos. Hoy es difícil encontrar variedades puras, sino predominancia de alguna de estas, en general, se consiguen híbridos, que buscan mezclar las mejores características de uno y otro tipo.
LOS GRUPOS PRINCIPALES DE CANNABIS QUE HOY PODEMOS MENCIONAR SON TRES: CANNABIS SATIVA, CANNABIS INDICA Y CANNABIS RUDELARIS.
ÍNDICA:
Desarrolla una gran cantidad de ramas, una estructura sólida y compacta y no suelen pasar el metro y medio de altura. Las plantas de esta variedad tienen hojas de foliolos anchos, de un verde intenso y un sistema de raíces que coloniza rápidamente la maceta. El periodo de floración es corto, produciendo grandes racimos florales, denominados cogollos, cubiertos de resina, muy compactos y de buen tamaño. El crecimiento y floración en este tipo de plantas es más previsible, lo que ayuda al cultivador a planear su cosecha.
SATIVA:
Son plantas con un mayor periodo de crecimiento, incluso durante la floración, muy altas. Las hojas tienen foliolos más angostos que los de las índicas y un verde menos intenso. En las zonas cercanas al ecuador, de las que son originarias, hay mucha luz y poca variación de horas de exposición entre el invierno y el verano, por lo que la planta tiene la posibilidad de crecer constantemente y desarrollar una floración más larga. Las sativas son naturalmente más aptas para el cultivo en exterior y climas cálidos, aunque se pueden obtener buenos resultados en interior si se les dedica atención.
(Fig. 5 cuadro comparativo)
Cultivo.
Los cultivos se pueden dividir en interior, exterior y mixtos (invernaderos)
Los cultivos de interior, se desarrollan en lugares cerrados, en ambientes controlados, donde se eligen los parámetros de aire, luz, suelo y temperatura. Por lo general se realizan en lugares con características climatológicas difíciles, con mucha humedad, vientos, etc. Al poder elegir las condiciones de cultivo, se tiene mayor seguridad de la calidad y cantidad del producto final, los cultivos de exterior son los elegidos para tener plantas de mayor tamaño, sobre todo por aquellos que hacen uso recreativo, y los mixtos tienen la ventaja de la utilización del sol, reduciendo el costo de electricidad y emisiones de CO2 generadas por los equipos de iluminación.
Cultivos de interior:
Están divididos en salas de crecimiento, mantenimiento de madres, esquejado y sala de flora.
Crecimiento, madres y esquejado: Se realiza en un cuarto donde se les asigna un periodo de luz de 18 horas, y uno de oscuridad de 6 horas. Allí, sea que comiencen desde semillas, o siendo esquejes, van a crecer el tamaño que se considere adecuado, bajo focos que mitan un espectro de luz fría, como pueden ser los mercurios halogenados o bajo consumo. En esta misma sala están las denominadas plantas madre, de quienes ya conocemos su genética y sacaremos los esquejes, para así trabajar siempre con el mismo material genético, contando con un producto final que mantenga siempre las mismas características.
Floración:
En este cuarto tanto el periodo de luz como el de oscuridad serán de 12 horas. Allí las plantas concentran toda su energía en producir los racimos florales, donde encontraremos la mayor concentración de cannabinoides, para luego ser utilizados en la elaboración de los aceites y tinturas.
Cultivos de exterior: En este tipo de cultivos es poco lo que se controla, quedando a merced de los factores climatológicos. La ventaja que tienen estos cultivos es el menor costo de producción y la exposición solar. Aun con esta ventaja, no es recomendable para trabajar con fines medicinales, ya que no permite realizar un cultivo estandarizado, teniendo en cuenta factores variables como temperatura, distintas exposiciones solares, viento, lluvia, mayor incidencia de patógenos y hasta robos.
Cultivos mixtos (invernaderos):
Estos cultivos son los ideales, ya que nos brindan el control del cultivo en interior, y la incidencia del sol. En ellos podemos controlar la cantidad de horas de exposición al sol, controlado con paneles que se cierren y abran automáticamente, generando oscuridad o luminosidad si hiciera falta complementando con luces. Es posible controlar la temperatura con calefactores o aire, la humedad con humidificadores, los vientos y la lluvia.
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